EL BOSQUE LOS ARRAYANES UN LUGAR ÚNICO EN EL MUNDO
Parque Nacional Los Arrayanes
Es
único en el mundo debido a que normalmente el arrayán es un arbusto, pero en
este lugar es árbol. Convirtiéndose así en el único Bosque de Arrayanes del
mundo. Debido a esto, ya hace unos años se trata de un área protegida, para preservar
su especie y la variedad de la vida autóctona.
El Parque
Nacional Los Arrayanes se encuentra en la Península de Quetrihué, al
norte del lago Nahuel Huapi. Lleva ese nombre ya que fue creado con el
objetivo de preservar un bosque de arrayanes. Estos árboles poseen flores
blancas y una corteza color canela con manchas blanquecinas.
Etimología
del topónimo: Se encuentra al sur de la Península de Quetrihué (en lengua
indígena: Quetri = Arrayán; Hué = lugar; “donde hay arrayán”).
Hasta
el año 1971, en que fue creado como parque independiente, el área formaba parte
del Parque Nacional Nahuel Huapi.
LEY
DE CREACIÓN: Ley Nacional Nº 19.292 para proteger uno de los bosques más puros
y extensos de Arrayán existentes en nuestro país (el otro bosque se encuentra
protegido en la Isla Victoria, P.N. Nahuel Huapi).
La
superficie total del Parque es de 1.753 hectáreas, pero el área que corresponde
al Bosque de Arrayanes son 20 hectáreas próximas a la costa, en el extremo sur
de la Península.
Para
llegar caminando a este lugar es necesario cruzar un sendero de 13 kilómetros
partiendo desde Villa La Angostura. A una hora de caminata, mas o menos, se
encuentra un arroyo proveniente de la laguna Huan-Huan. Este arroyo durante el
verano suele secarse.
En
su comienzo la senda tiene pendientes bastantes abruptas, que se convierten en
largas ondulaciones a medida que se acerca al Bosque de Arrayanes.
En
el primer tramo, desviado a la derecha por un sendero escalonado, se llega a
dos miradores de la Península (en el área existe cartelería interpretativa). En
uno se observan los brazos Machete, Rincón y Última Esperanza del Lago Nahuel
Huapi . En el otro, el istmo de la Península y Villa La Angostura.
La
senda atraviesa zonas boscosas, con pedreros en el inicio, algunos claros y
lugares abiertos.
En
el km. 11, se aprecia la Laguna Patagua y poco más adelante, los arrayanes
comienzan a aumentar en cantidad, hasta llegar al corazón del bosque, donde se
transforma en la especie principal y predominante.
Más
adelante se localiza la antigua entrada a la estancia Quetrihué, desde
donde se va a comenzar a ver la laguna Patagua. Llegando a la vivienda del
guardaparques solo hace falta hacer unos metros más para poder comenzar a
transitar por el Bosque de Los Arrayanes. Son unos 600 metros preparados para
recorrer el lugar sin dañarlo.
Al
terminar este sendero hay una casa de té en donde uno puede sentarse a
disfrutar algo calentito antes de emprender la vuelta. En esta cabaña se pueden
tomar el Té, un refrigerio o adquirir artesanías y recuerdos del lugar.
Llegando
al final del sendero se encontrará con el Centro de Informes al visitante, en
donde podrá hacer cualquier consulta a los Guardaparques encargados del área.
Muchos de los que visitan
el Parque Nacional Los Arrayanes, en el sur de la Provincia de Neuquén, no se convencen si
alguien les dice que el verdadero “Bambi” nunca vivió allí. Arriscan la nariz:
que el “Nahuelito” no haya salido a tomar el sol en alguna
playa de la península de Quetrihué (Neuquén), vaya y pase, pero que Bambi no
haya sido un huemul tierno y juguetón, no les gusta.
Abarca
toda la península de Quetrihué ubicada en el extremo Norte del Lago Nahuel
Huapi.
Se
accede a Villa la Angostura por vía terrestre, sea en automóvil u ómnibus, a
través de la ruta nacional Nº 40, desde San Martín de los Andes por el circuito
de los Siete Lagos, como así también por el sureste, desde Bariloche, bordeando
en gran parte de su trayecto el lago Nahuel Huapi. Mientras que en avión, se
puede arribar a las ciudades cordilleranas antes mencionadas, y desdes estas ir
a Villa La Angostura en ómnibus, remis o transfer.
Ya
en la ciudad cordillerana, las opciones típicas para acceder al bosque son dos:
•
La primera es a través de una excursión lacustre hasta el Puerto Quetrihué.
•
La segunda opción, es a pie o en bicicleta, atravesando la Península de
Quetrihué por la senda peatonal, que nace en la entrada al parque (zona de
puertos, a metros del muelle municipal Bahía Brava.)
En
el caso de realizar la senda, se registra el ingreso en la oficina de informes
que posee Parques Nacionales, para luego comenzar una senda de unos 12 Km. de
recorrido, de mediana dificultad, que demanda aproximadamente unas 3 horas a
pie ó 2 horas en bicicleta (prestando atención en las indicaciones de ciertos
tramos de la senda).
El
sendero recorre toda la Península de Quetrihué y ofrece hermosos paisajes del
bosque y vistas panorámicas del Lago Nahuel Huapi. Además del famoso bosque de
Arrayanes se recomienda realizar una corta caminata hasta la Laguna Patagua
donde podrá contemplar un ambiente abierto y disfrutar de las pedregosas playas
de sus orillas.
También
se puede realizar el paseo acompañado de un prestador de servicios turísticos.
Dentro
del Parque Nacional Los Arrayanes no está permitido acampar.
Clima: El
clima que caracteriza al área es templado-frío. Las precipitaciones anuales son
de aproximadamente 1300 mm, concentradas en su mayor parte entre
mayo y noviembre. El verano es la estación más seca.
Las
temperaturas medias de verano rondan los 13 °5 y las de invierno los 3° 1.
Los
vientos soplan fuertes desde el oeste casi todo el año, con velocidades
promedio cercanas a los 20 km por hora.
Flora
El
Arrayán
Especie
de familia de la Mirtáceas, su nombre científico es Myrceugenella Apiculata ó
Luma Apiculata, arbusto nativo de la región de los bosques subantárticos o
Andinos Patagónicos, de zona húmeda, suele crecer a orillas de lagos y ríos.
Aquí lo encontramos con un porte de más de 16 mts. de altura y con ejemplares
de hasta 600 años.
Se
reproducen de 3 formas: de yema de vástagos originados por raíz; de semillas y
de ramas caídas.
El
crecimiento es lento, y su tronco crece retorcido, en busca de la luz, La
corteza, lisa y fría, es de color canela debido a que contiene gran cantidad de
tanino. Al desprenderse en finas laminillas y placas deja manchas blanquecinas
que le dan al bosque su particular característica.
Su
follaje es persistente, de hojas opuestas, sus flores son blancas, parecidas al
azahar. Su fruto es negro violáceo brillante, comestible, con el cual los
aborígenes elaboraban una bebida alcohólica llamada chicha. En la medicina
popular, se prepara una infusión con las hojas para calmar dolores musculares,
afecciones intestinales y bronquiales.
El
Bosque
Gracias
al suelo y clima que existe en el lugar, en el Bosque de Arrayanes se
desarrollan además, casi todas las especies arbóreas del Bosque Andino
Patagónico. Encontramos más de 19 especies autóctonas, y exóticas.
En
el nivel superior se ubica el coihue, debajo crecen otras especies adaptadas a
la sombra: aljaba, maqui, palo santo, ciprés, radal, cacho de cabra, espino
azul, orquídea, patagua, helechos y Arrayán.
Este
Bosque de Arrayanes, de forma arbórea y casi puro, formado por una densa y
espectacular comunidad, es uno de los dos que existen en el mundo y el único
que puede transitarse.
El
sendero entablonado de 800 mts y el cerco facilitan el recorrido al visitante y
a su vez protegen al bosque de la masiva y constante circulación de peatones.
El pisoteo del manto vegetal virgen impide su desarrollo y el crecimiento de
renovales.
Fauna
Avifauna
Si
se recorre en silencio el sendero, escuchara el canto del chucao o el huet
huet, aves que se refugian en el bosque sombrío y húmedo, como
cabecitas
negras, comesebo patagónico, colibríes, rayaditos, diucas, pitíos, pájaros
carpinteros.
T
ambién
es posible observar sobre el agua algún cormorán imperial, biguá, cauquén
común, pato barcino y hasta la familiar gaviota cocinera.
Entre
la fauna se encuentran numerosas aves.
Una de ellas es el zorzal patagónico,
que fabrica su nido con barro, pasto y musgos, eligiendo zonas de vegetación
densa. Coloca de 2 a 3 huevos celestes con pintitas marrones.
En el
interior del bosque habitan comesebos, rayaditos y chucaos. En las
orillas del lago, se pueden encontrar hualas y garzas brujas (Nycticorax
nycticorax).
Además,
este bosque alberga poblaciones de huillines (Lontra provocax), cumpliendo la
importante función de ser uno de los pocos refugios para la especie
El
huillín es un mamífero carnívoro, de la familia Mustelidae, cuyo estado de
conservación en la Argentina es el de “en peligro”.
Este animal de
pelaje pardo-castaño y aspecto similar a una nutria grande, puede superar el
metro de largo. Siempre asociado a cuerpos de agua, medio en el cual se
desplaza ágilmente, habita ríos, lagos y lagunas de los bosques subantárticos,
donde consigue tanto su alimento como sitios donde refugiarse en la densa
vegetación que bordea las orillas.
Mirador
Arrayán
Al
ingresar al Parque Nacional Los Arrayanes el camino se bifurca. Hacia la
derecha, por el sendero escalonado, en 20-30 minutos, se llega al mirador
Arrayán.
Desde
allí se observa una vista panorámica del Lago Nahuel Huapi con sus brazos El
Machete, El Rincón y Última Esperanza; La Bahía Brava, la Isla Fray Menéndez y
el cordón montañoso que nos limita con Chile.